Opinología Cultural: La Política detrás de "Sheldonizarse"

La serie The Big Bang Theory se ha transformado en una especie de culto ñoño desde la popularidad. No tengo idea de los índices de sintonía que tiene, pero después de ver todos los capítulos de todas las temporadas disponibles, tengo mi crítica opinóloga.

Mi tesis es que el éxito de la serie se debe al reconocimiento de la ñoñería como un valor para la cultura debido a los cambios en la misma. En ese sentido, esta serie está al mismo nivel que la web de PhD Comics y que la historia de la creación de Facebook The Social Network. Es decir, hacen sentido solo porque responden a los cambios que ha experimentado la sociedad.

Veamos qué cambios hacen esta serie posible:
1) No es ninguna novedad que la expansión de la matrícula en la educación superior implica que más personas estudien. Ergo, la cantidad de ñoños (o los que se las dan de ñoños) ha crecido junto con el sistema.
2) Que exista una web que constantemente esté actualizando exitosamente tiras cómicas sobre los estudiantes de doctorado, y vendiendo souvenirs al respecto implica que existe un público no menor de personas que se identifican con esta cultura, y por ende la consumen. Mantenerse constante y voluntariamente vinculado a las instituciones de educación como estudiante (por más de los 16 años que exige la educación media + universitaria) es por cierto un ejemplo de ñoñería (o de falta de trabajo).
Estos dos cambios en sí mismos explican que exista una experiencia común para instalar la posibilidad de transformarlas en mercado.

Pero no se trata sólo de consumo. También es producción de cultura. Ya nuestro admirado Antonio Gramsci señalaba que la construcción de poder (y por tanto, la política) no se medía solamente por el control burocrático del aparato estatal, sino también por la creación de consentimientos espontáneos para la dominación: la hegemonía. Es decir, se crea una práctica cultural mediante la cuál las clases subalternas aceptan las reglas del juego que las clases dominantes imponen. Para ello crean instituciones que exceden al Estado, y se cuentan así los medios de comunicación y su programación (televisión, radio, diarios, revistas), las instituciones que reproducen comunidades (escuelas, universidades, iglesias, centros comunitarios, ONGs), y por cierto en nuestros tiempos, la gran maquinaria para disponer de mano de obra sin el control administrativo del Estado: empresas privadas.
El rollo de la meritocracia está en el centro de quien persigue estudiar. El rollo de la ñoñería quizás no tanto. Ser ñoño en la época pre-Sheldoniana (no se me ocurre otro nombre, podría ser pre-Nerds, pero no es lo mismo) no era la experiencia más gratificante en términos de reconocimiento social de pares. En general, el estereotipo no es necesariamente un tipo exitoso, ni lindo, ni muy integrado socialmente. Y claro, siempre es el ñoño con o, pues la discriminación de género también se da en esta producción de estereotipos. Juzgue usted si el estereotipo de ñoño calza con su experiencia.
Lo que hace The Big Bang Theory y todos sus asociadas producciones es motivar una 'maintremización' de la ñoñería (si se me permite el término). O sea, transformar al rechazado social (por ser ñoño) en alguien que es aceptado en el círculo de los exitosos no mediante un reconocimiento formal, sino por sus prácticas cotidianas. Y por supuesto, quien sea ñoñ@ exitos@ tiene que sentir un grado de identificación y dependencia con una "cultura ñoña" que se reproduce cada vez con mayor facilidad sin necesariamente cambiar los patrones de dominación. El propósito de The Big Bang Theory no es otro que incrementar los beneficios para la clase dominante y para mantener el modelo de dominación. ¿Cómo? Creándole potencialidades positivas a estereotipos negativos, y manteniendo los estereotipos típicos en regla. En este caso se observa que:
1) Los que son inteligentes/ñoños tienen un estilo de vida en que el consumo refleja éxito: tienen computadores, juegan en línea, piden comida preparada todos los días, su casa está limpia y ordenada, asisten a eventos, viajan, etc.
2) Las ñoñas mujeres son menos o no son. Se mantiene el sesgo de género en términos del trabajo (dos de las mujeres que rodean a los ñoños protagonistas son denostadas por ser garzonas) o en la creación de estereotipos (otra mujer  cumple con el estereotipo de la extranjera/rica que se tiene que casar, y una tercera cumple con el estereotipo de la ñoña perdedora y positivista que pierde su cualidad de ñoña/inteligente cuando se sentimentaliza). Asimismo, la mujer que se integra al grupo, la artista, no tiene dinero y es el objeto sexual de los ñoños.
3) Sheldon Cooper es un ególatra obsesivo al que sus amigos le aguantan todo. No conozco ningún ejemplar de la ñoñería al que le haya pasado eso. La experiencia me indica que no es el ñoño el que dicta las reglas de un grupo, sino más bien el que las sigue para poder integrarse socialmente. Eso no pasa en esta serie.
4) El hombre que no tiene un PhD es mirado en menos, más aún si se le atribuyen negatividades como que vive con su madre, o que es un galán-perdedor. Se crea con ello la idea de que un ñoño por definición está sobreescolarizado y es un ganador.
5) Otra observación, al estilo del documental No Logo de Naomi Klein, es la referencia continua a grandes corporaciones que dominan el consumo en gringolandia (ejemplo: The Cheesecake Factory, Cotsco), lo que transforma a la serie en un infomercial encubierto.

Por lo tanto, mediante la exposición de la ñoñería como valor, esta serie explota un nicho que hoy hace ricos a muchos: la especulación en torno al valor de las credenciales educativas, o el camino opcional a la (pose de) ñoñería. Eso incluye a los que hoy día especulan con créditos estudiantiles, y con la creación/destrucción de artefactos de la tecnología de comunicaciones e información. Junto con eso, tiene rasgos misóginos al refregarle a la mujer que su lugar está en trabajos de menor categoría (aun cuándo puede acceder a estudiar "artesh"), o se le integra marginalmente a la cultura ñoña, con la condición de que pierda sus cualidades "sensibles" o las mantenga con fines sexuales.

 Como opinión personal, estudiar un PhD no tiene que ver con convertirse en ñoño, sino con la oportunidad de ampliar el conocimiento. Si usted nunca fue ñoñ@ ni disfrutó estudiar, no lo será por endeudarse para ganar más credenciales educativas, ni tampoco lo será por seguirle la corriente a The Big Bang Theory.

Si tiene la oportunidad, diviértase. Es una serie entretenida para quien maneja ciertos códigos de la ciencia, y de la cultura popular gringa. Pero por favor, no la use como su modelo de vida, por mucho que le digan que Smart is the New Sexy.