martes, 30 de diciembre de 2008

Ciencia Auténtica

La escuela debería ser un acuerdo. Un acuerdo entre los intereses de una persona, los de su familia y los de la sociedad. La persona (que es el estudiante) en realidad no decide tanto al principio, sino más bien su familia, que en algunos casos decide a qué escuela irá y en otros decide si irá o no a la escuela. La sociedad, en general, promueve el acuerdo poniendo en la mesa los estándares, o el curriculum. ¿Qué tiene que ver esto con el título de esta entrada?, comento a continuación.
Calificar algo como "auténtico" no es algo tan fácil. De hecho, para definir el término "Ciencia Auténtica," hay muchas complicaciones. En Estados Unidos se ha impulsado la idea de que las clases de ciencias sean más "auténticas." Podemos asumir que ciencia auténtica, o autenticidad en general, implica que en una sala de clases vamos a imitar lo más posible lo que son las prácticas habituales de una cultura, que en este caso será la cultura disciplinaria de las ciencias, pero que podría tratarse de cualquier cultura. También autenticidad significa que lo que una persona haga es significativo para sí mismo.
Pero las ciencias en sí mismas tambien incluyen variadas culturas, tradicionalmente (o más bien, actualmente) divididas de acuerdo a sus radios disciplinares de acción. Estará la cultura de los químicos, físicos, biólogos, meteorólogos, bioquímicos, etc. Por lo tanto, este impulso que se le da a la idea de autenticidad en las escuelas implica un desafío mucho mayor para los profesores. En general, yo estoy de acuerdo con que las clases deben ser más auténticas, lo que implicaría que los estudiantes irían a la escuela a estudiar algo que es significativo para su propia vida y tiene una significación mayor para las culturas que necesitan alimentar de nuevas personas las disciplinas del campo laboral. En mi opinión, ahí reside uno de los principales problemas, mas bien éticos, que implican el uso de este término. ¿Quién decidirá qué es auténtico? En este sentido, y considerando lo que se ha definido por autenticidad, yo podría decir que es el acuerdo, pues auténtico implica algo significativo para quién aprende (el estudiante) y algo que imita las prácticas de la cultura (la sociedad).
Para los profesores, el desafío es mayor. La sola idea de pensar imitar las prácticas de la ciencia en las salas de clases, cuando poca experiencia se tiene practicando las ciencias, es un desafío. ¿Podría un profesor de biología imitar exactamente lo que hace un biólogo en su laboratorio o en su consultora medioambiental? ¿Podría un profesor de física imitar lo que hace un astrónomo o lo que hace un ingeniero civil? ¿Podría un profesor de química imitar lo que hace un químico en la industria o en su laboratorio de investigación?
Está claro que no, y tampoco es la idea de que autenticidad en una escuela signifique que en vez de profesores necesitamos "practicantes" de las disciplinas para que nos muestren "el mundo real." Pero no estaría mal que los profesores, de ciencias al menos, pudieran entregar la oportunidad a sus estudiantes de que imiten las prácticas de esas culturas (de científicos), que están mucho más cerca de lo que uno cree.
El próximo semestre comenzaré a trabajar en un programa pionero (para mi al menos) en el cuál profesores que hoy están haciendo clases tendrán la oportunidad de acceder a prácticas pagadas en industrias o compañías del área científica y matemática. Todo ello en el marco de un programa de magíster. La idea es que trabajen en esas compañías durante el verano, y que se reúnan a ver cómo implementarían lo que ven en "el mundo real" en sus clases de ciencias y matemáticas. Luego, durante tres años participarán en clases para aumentar su conocimiento y desarrollar trabajo colaborativo y evaluación de la implementación en sus salas de clases. Se ve muy interesante y tal vez sea una forma de responder a estos desafíos.
Como conclusión, creo que es necesaria una nueva sala de clases, donde cada uno encuentre que tiene oportunidad de aprender algo que le será significativo y que en el "mundo real" tiene importancia. Si la ciencia auténtica es parte de esa oportunidad, bienvenida sea.


Bibliografía recomendada

Brown, J. S., Collins, A., Duguid, P. (1989). Situated Cognition and the Culture of Learning. Educational Researcher, 18(1), 32-42.

Buxton, C. (2006). Creating Contextually Authentic Science in a “Low Performing” Urban Elementary School. Journal of Research in Science Teaching 43(7), 695-721.

Chinn, C. A., Malhotra, B. A. (2002). Epistemologically Authentic Inquiry in Schools: A Theoretical Framework for Evaluating Inquiry Tasks. Science Education, 86(2), 175-218.

Herrington, A., & Herrington, J. (2006). What is an Authentic Learning Environment? In A. Herrington & J. Herrington (Eds), Authentic Learning Environments in Higher Education (pp. 1-13). Information Science Publishing, PA: Hershey.

Lee,H. & Songer, N. B. (2003) Making Authentic Science Accessible to Students. International Journal of Science Education, 25(8), 923-948.Martin, B, Kass, H. & Brouwer, W. (1990). Authentic Science: A Diversity of Meanings. Science Education, 74(5), 541-554.

Imagen: http://mondomedico.files.wordpress.com/2008/02/ciencia.jpg