jueves, 11 de abril de 2013

“Los Beyer”


El lucro tiene defensores transversales. Es curiosa la cáscara que envuelve defensivamente al acusado ministro Beyer. Son como un “partido transversal de derecha”que ha salido a articular en el sentido común el discurso de defensa de Beyer, el político. Son “Los Beyer”.

viernes, 5 de abril de 2013

Beyer y la superación de la tecnocracia


Las siguientes notas son recomendaciones que emanan de artículos académicos de uno que otro think tank  o centro académico criollo.
“Se estima que en la situación actual no es recomendable suprimir el financiamiento compartido porque éste ha allegado importantes recursos a educación, pero además porque no es evidente que la prohibición de aportar a la educación de los hijos en el colegio inhiba a los padres de gastar en su educación.”
“La clave está en seleccionar adecuadamente a los directivos de las escuelas y liceos públicos y luego empoderarlos para que realicen una gestión orientada a los aprendizajes de los estudiantes. Por cierto, esa orientación debe ser apoyada desde fuera con exigencias específicas de desempeño de los estudiantes. Los directivos deben ser evaluados en función del cumplimiento de esas exigencias.”
“No hay tampoco aquí, entonces, desde el punto de vista de los desempeños educativos, razones para justificar un financiamiento especial para los establecimientos estatales.”
“Parece necesario, entonces, introducir cambios al régimen laboral de los docentes, asegurando algún grado mayor de libertad para los sostenedores públicos de educación.”
El factor común de las citas es que su autoría corresponde al hoy acusado-constitucionalmente ministro de educación de Sebastián Piñera, Harald Beyer.

martes, 2 de abril de 2013

Multitud resentida versus Michelle Bachelet


El resentimiento no goza de apreciación en política, meno saún en nuestra criolla versión de “estabilidad” post-dictatorial. Es algo injusto que se le menosprecie, pues su existencia bien puede tener un carácter descriptivo de las subjetividades que se juntan gracias al movimiento social del 2011 en adelante. El resentimiento tiene su raíz en la percepción, real o imaginada, de que algo que ocurre está mal. A ello se le suma la acumulación de experiencias de humillación y pérdida del sentido de dignidad humana.